El rafaelino, ahora director técnico de Belgrano, habló con La Cábala luego de asumir el cargo que ocupa tanto en el Torneo Federal B, como en la Liga Paranaense de Fútbol. «Tener buena gente en el equipo hace pensar que uno puede trabajar con tranquilidad y puede deslumbrar en un futuro» fue una de sus primeras observaciones sobre el plantel con el que se encontró en el Mondonguero.
«Los jugadores están golpeados. Se nota en su rostro, en las respuestas. Están un poco preocupados» dijo luego de la requisitoria de cómo ve al plantel que va a dirigir. «Son buena gente. Un par de chicos me dijeron que ellos son los culpables no el entrenador que salió. Eso habla de buena gente. Ellos han hecho sus cosas pero lamentablemente no les han salido» continuó, en la misma tónica.
Yendo al tema futbolístico, admitió que durante esta jornada volverían al trabajo y que tuvo una charla con Pablo Suárez, su ayudante técnico, para comenzar a diagramar lo que busca para el equipo, manejando las características con las que cuenta. «Le di tres conceptos muy claros al equipo: para salir de este momento hay que querer salir. No se sale solamente por un cambio de entrenador, se sale con un cambio de actitud grupal. Uno necesita que el jugador sepa el momento que está viviendo y lo sepa interpretar en función de lo que tiene que hacer en el terreno de juego» detalló sobre su charla con el ex delantero de la institución.
Admitió que para sacar del fondo de la tabla de la Zona 5 del Torneo Federal B, necesitará el apoyo de todas las partes, el entrenador, el jugador, el cuerpo técnico y los dirigentes. A todo esto reconoció que ya estuvo observando al equipo que ahora dirige: «vi videos de cómo se jugaba con el otro técnico. Hay un equipo que juega bien al fútbol y que, para mi punto de vista, tiene que defender un poco mas duro y ser mas vertical a la hora de atacar». También investigó a los elencos con los que comparte zona, entre ellos a su ex equipo, Ben Hur: «pude observar partidos de Ben Hur, mas allá de que trabaje ahí. Achirense es el que saca una punta por la calidad de sus jugadores, están bien físicamente. En el caso de 9 de Julio, a su entrenador lo conozco de toda la vida, lo tuve como alumno y lo cruce en la liga. Es un gran equipo, muy batallador», de todos modos está convencido de que el Albiceleste merece otra actualidad: «Belgrano tiene que estar un poco mas arriba, pero bueno es fútbol y lo que uno habla lo tiene que poner en cancha».
Sobre su pasado como entrenador, sabe que esta no es una pelea que no haya atravesado: «pelee descensos y ascensos. Cuando nos fue mal, paramos la pelota y dijimos: ‘lo que es blanco es blanco, lo que es negro es negro y lo que dice el técnico no se negocia’. y vamos todos, que de esta situación se sale así. Yo creo en la mística, en el contagio y en lo mental. Si estás fuerte de la cabeza, lo que planteás lo realizás y si tenés una protección de la dirigencia y todo está bien y cambiamos de animo, tenemos mucha mas chances de salir».