Debut y despedida para el Gato paranaense. Paraná empató 1-1 ante Unión de Santa Fe en la ciudad de Rafaela por los 32avos de la Copa Argentina y cayó 4-3 en la tanda de penales. De esta forma el Decano no pudo avanzar en la copa nacional y se despidió rápidamente.
HUBO DIFERENCIAS DE CATEGORÍA
El partido inició con ambos equipos bien concentrados y decididos. Ya en el arranque, se advirtieron el uno a el otro que no sería un desarrollo sencillo.
El Decano trasladó la pelota y logró llegar hasta el área de Nereo Fernández, sin embargo, por momentos sintió mucho las diferencias de jerarquía tanto individuales como colectivas a favor de su oponente.
El Tatengue, que no se guardó nada para enfrentar a Paraná, supo mantener controlado a su rival para que no le genere mayores preocupaciones. Desde los primeros minutos las chances de gol que tuvo el conjunto de Santa Fe fueron mucho más claras que las del equipo de Paraná.
Unión controló la pelota e inquietó a la defensa del Gato constantemente. Y, empujando, a los 22 tuvo una buena chance. Claudio Riaño logró deshacerse de la marca de Diego Reynoso y encaró al arco de Ruggiero, pero ante la imposibilidad de anticipar la jugada el defensor de Paraná se trastabilló y en la caída empujó la pelota con la mano. Instantáneamente, Penel cobró penal para los de Leonardo Madelón, que a través de Ignacio Malcorra llegó al primer gol.
Desde ahí, las cosas se inclinaron para un solo lado de la balanza, al menos en lo que fue la primera parte, ya que Unión acrecentó sus labores de creación de juego y llego reiteradamente al arco de Paraná. El equipo de Cervilla, como pudo, aguantó las embestidas de su rival, que tuvo la chance del segundo más de una vez. Con esta imagen se terminó el primer tiempo, en donde quedó clara la diferencia en la precisión de uno y otro.
JUGÓ DE IGUAL A IGUAL
En la segunda parte, el entrenador del Decano realizó la primera variante al mandar a la cancha a Lisandro Alzugaray en lugar de Sergio Modón. Y con este cambio, Paraná salió a jugar con otra cara debido a que mejoró enormemente su trabajo colectivo y la precisión en los pases.
El mecanismo del Gato se aceitó y fue escalando la cancha, hasta que a los 8, a través de una gran jugada grupal y un muy buen pase al corazón del área de Alexis Ekkert; Lisando Alzugaray convirtió el empate para su equipo.
En este marco se vio un complemento mucho mejor desde el lado futbolístico. Con la igualdad instaurada ambos salieron a dejar todo en el campo de juego y así el encuentro pareció un partido de ping pong por las idas y vueltas.
Obviamente, el elenco santafesino una vez más demostró porqué compite en la primera categoría del fútbol argentino y en varios contraataques incomodó a la línea de fondo del Gato.
El Rojiblanco de la capital entrerriana no la pasó bien, es cierto, pero no se achicó ante un rival que le fue con todo su arsenal; lo pudo aguantar e incluso tuvo chances de marcar su segundo tanto. En los minutos finales el equipo de Cervilla se replegó de mitad de cancha para atrás, aceptando el empate y esperando llegar a los penales. Unión hizo todo lo que pudo por llegar al segundo gol pero le fue imposible quebrar la defensa de Paraná que en el segundo tiempo sacó todo lo que se arrimó al área de su arquero. El tiempo se terminó, Penel sentenció el final y llegaron los penales.
En la tanda desde los 12 pasos, la historia fue pareja hasta que Nereo Fernández le atajo el tercer penal a Martín Galli y se terminó cuando Tomás Machado no logró concretar el cuarto penal.
Así la serie terminó 4-3 para el conjunto santafesino que accedió a la siguiente instancia de la Copa Argentina, el Decano se despidió temprano de la competición. Paraná no debe lamentarse de nada, le pudo hacer partido a un equipo de Primera División y de buena talla como lo es Unión, y mostró que tiene con que defenderse y pelear hasta el final.
Foto: El Once.