UN REDUCIDO CON LEVES INDICIOS

Este martes por la mañana, en el predio La Capillita, Patronato tuvo minutos de fútbol en espacios reducidos. Sebastián Bértoli no entrenó.

Los días están contados. La necesidad de revancha que tiene el plantel tras la derrota en Rosario se siente. Por eso, Rubén Forestello y compañía, comenzaron a diagramar un posible equipo, en el que no estarán Espinoza ni Telechea, ambos expulsados frente a Central.

Serán dos ausencias importantes para un equipo que genera, pero al que le faltan detalles, o suerte, para concretar. Por esto, este martes, los futbolistas tuvieron minutos de fútbol en espacios reducidos, con jugadores mezclados, pero dejando algunos indicios.

Por el lado defensivo, Andrade continuará peleando el puesto con Iván Furios, pero apareció la figura de Lautaro Geminiani por la banda izquierda, algo que no se encontraba en los últimos días. En el mediocampo, apareció Guzmán, habitual reemplazo del chileno. Si bien Minetti estuvo a su lado, es complicado que Chamaco pueda ingresar, debido al buen presente de Lemos.

En la ofensiva, no estará el delantero de asistencia perfecta. Quiroga sería el reemplazante habitual, aunque por el momento en ese puesto no se dan mayores detalles. El Tano Gagliardi tiene una molestia en su pierna izquierda y hoy es duda; lo mismo que Bértoli.

Faltan días, pero en horas el espectro va a cambiar, se aclarará y aparecerá un probable once, que tendrá, como mínimo, dos modificaciones obligadas. Mientras tanto, esperan al capitán que todavía no puede entrenar.

Con una idea más clara del rival, el plantel se moverá este miércoles por la mañana, nuevamente en el predio La Capillita.

ENFERMERÍA

Bértoli hace tiempo que se encuentra en tratamiento. El tobillo le impide pisar con normalidad y dificulta que pueda entrenar. Por momentos camina alrededor de la cancha, pero realiza doble sesión de kinesiología.

Por otra parte, Alejandro Gagliardi rambién asistió al kinesiólogo y espera llegar al fin de semana para recibir al Cuervo.

Lautaro Comas y Mauricio Carrasco continúan ejercitándose aparte, aunque el Gordo, si nada sale mal, podrá volver a estar a la par luego de San Lorenzo.

Por Gabriel Obelar y Gabriel Maidana.