La Cábala Las últimas de noticias sobre deportes de Paraná, Entre Ríos y la región: fútbol, básquet, rugby, automovilismo, handball, sóftbol, voley y más. El central de Patronato dialogó con La Cábala en el final del partido en Casa Amarilla, en el que remarcó: «El primer tiempo fue la diferencia», al admitir que: «Los respetamos». Por último, expresó: «Hay que seguir trabajando, el material está».
Mejoró en el segundo tiempo, emparejó las acciones, pero la clave pasó por los primeros cuarenta y cinco minutos del primer tiempo en Casa Amarilla, donde Boca le ganó 1-0 a Patronato. «Nos vamos con un sabor agridulce, porque sabemos que en el primer tiempo no la tuvimos, erramos muchos pases fáciles que agrandó a Boca, que juega bien igual, pero lo respetamos, pero la idea era hacer el juego que nos caracteriza y hacer el mismo partido que ante Huracán, Newell’s, Independiente», analizó Duarte, el central del Patrón.
A la vez, explicó: «En el primer tiempo fue la diferencia. Ellos nos hacen el gol de pelota parada, no fue de jugada que hayan creado. Fueron situaciones en la que nos equivocamos».
Al hablar de la diferencia futbolística, Bruno remarcó que está cuando dejan jugar: «La diferencia se nota cuando dejamos jugar al rival, ahí se nota, pero cuando hacemos nuestro juego, de emparejar y meter, correr y jugar, quedan todas las diferencias de lado. Pero el primer tiempo fue clave. En el entretiempo Martín nos despertó y salimos a obligarlos a ellos, a dividir y tocar. No tuvimos chances claras, más allá de todo», se sinceró.
«Tenemos una bronca, porque hacemos buenos partidos pero los resultados no llegan. Erramos goles, situaciones y demás. Hay que seguir trabajando, pensar en positivo. El material está, sabemos que si jugamos bien, vamos a llegar lejos».
Para finalizar, el oriundo de Federal, contó sus sensaciones de jugar contra Boca en Casa Amarilla: «Es una sensación muy linda. Cuando voy a entrar a la cancha, lo veo a Schiavi y de verlo se me erizó la piel. Pero después no me genera mucho. Vengo de Federal, un pueblo, donde nada que ver, pero lo tomo con calma y me acostumbro a esto», finalizó.
Por: Gabriel Obelar.
