El entrerriano será refuerzo de Barracas Central en la próxima temporada de la Primera Nacional. Este martes, habló con La Cábala sobre su desembarco en la segunda división del fútbol argentino y cómo lo ha afectado la cuarentena.
Nacido en Gualeguay pero criado en Paraná, Juan Capurro tendrá en este particular 2020 la oportunidad de llegar a la Primera Nacional. Tras varios años en el Federal A, el volante será refuerzo de Barracas Central para la próxima temporada.
En diálogo con La Cábala, el entrerriano aseguró que esta oportunidad «me agarra en un buen momento, la venía esperando hace un par de años». Luego, agregó: «Me toca un poco más de grande (NdR: tiene 26 años) pero me siento bien y preparado. Llego a un club con aspiraciones de ascender, con infraestructura».
Esta no es la primera vez que le surge la posibilidad de acercarse al Rojiblanco: «Tuve la oportunidad cuando el club estaba en la B Metro, pero me quedé en el Federal A. Cuando ascendieron me llamó el mánager nuevamente y ahora hablé con (Matías Tapia) el hijo de Chiqui que es quien está a cargo del club y llegamos a un acuerdo».
«Sinceramente no seguí al club mientras no estaba, sé que estaban un poco complicados como para poder pelear un ascenso en estos tres meses que quedan, es una planificación un poco más a futuro», resaltó sobre los objetivos de su nuevo equipo.
Sus inicios
En otro tramo de la charla, Juan Capurro contó que comenzó desde muy pequeño con el fútbol: «A los cinco años vine a Paraná, arranqué en Palermo, pasé por Belgrano y a los 15 me fui a Racing pero no aguanté». En ese momento, la decisión de permanecer cerca de sus afectos pesó mucho más: «Me fui a probar a Unión para ver si podía zafar de Buenos Aires; quedé y estuve haciendo las inferiores en Santa Fe».
«Yo no estaba dispuesto a dejar todo por ir a Buenos Aires, no me gustó la idea de perder tantos años lejos de mi familia y amigos. Una vez que quemás esas etapas no las recuperás. Preferí estar cerca de los míos y vivir mi adolescencia con las personas que quería», enfatizó.
Ante la consulta por su estilo de juego, relató: «Con los años fue cambiando. Era un volante defensivo, ahora soy mas ofensivo. Me gusta jugar con la pelota, asociarme, tener y generar el circuito de juego».
Cuarentena y futuro
El gualeyo reconoció que vivió momentos complicados durante el aislamiento: «Fue todo un proceso, hubo ratos en los que no tenía ganas de entrenar. Pensábamos que se iba a hacer menos largo todo esto. Pero en un momento hubo que decir basta y dejar de pensar en negativo porque sino te perjudicás vos mismo. Ahora ya con todas las pilas».
Enfocado en lo que viene, Juan Capurro remarcó: «Esta semana terminé de cerrar el departamento, calculo que para el 25 tengo que estar allá por el tema del hisopado. Una vez que nos den el resultado empezamos a entrenar».
En relación a esos primeros días, opinó: «Creo que va a costar, habrá muchas lesiones y con la pelota no va a ser lo mismo. En mi caso, hace tres o cuatro meses que no toco una pelota, entreno en el patio con un profe. En lo futbolístico creo que el nivel no va a ser el mismo del que venía siendo en el campeonato», culminó.